Redacción: TN8 y Primerísima
Sin pudor ni remordimiento de conciencia, Alejandro César Lacayo Noguera; de 44 años, terminó con la vida de su madre tras supuestamente golpearla brutalmente y quemarla dentro de la vivienda donde habitaba. Se dice que esta vivienda se ubicaba en Villa Fontana, Distrito I, de Managua.
Preliminarmente, lo que se conoce es que el hombre, tras cometer el horrendo acto, se encontraba bajo los efectos del alcohol y sustancias alucinógenas; lo que provocó que, sin el más mínimo dolor, terminara con la vida de quien un día se la dio.
La víctima fue identificada como Magda de los Ángeles Noguera Vega, de 76 años, quien fue trasladada de emergencia al Hospital Fernando Vélez Paíz; donde durante varios días luchó por su vida.
Hechos trágicos azotan Managua
El hecho ocurrió el 18 de abril del año 2024 y falleció el pasado sábado cuatro de mayo debido a las graves lesiones que presentaba tanto física como internamente. El presunto agresor ha sido detenido, y aquellos que lo conocen afirman que ha tenido encuentros con la justicia en el pasado; debido a sus reiteradas agresiones contra otras personas.
En los últimos días, en el país han ocurrido trágicos sucesos donde las mujeres han sido la principal protagonista. Hace semanas atrás; una mujer de la tercera edad falleció a manos de su hijo por intentar robarle dinero. Los hechos ocurrieron en el sector del puente desnivel de Rubenia.
Historia del asesino
Desde niño, cuentan sus familiares, Alejandro se comportó de mala manera. En cambio, tres hermanos, incluyendo a su gemela, eran todo lo contrario: buenos muchachos, estudiosos, amorosos y dedicados a sus padres; todos estudiaron y son profesionales. Todos ellos fueron criados en un hogar con todas las comodidades y mucho amor. Desde la adolescencia, Alejandro se hizo adicto a los juegos de azahar, al licor y poco después a la droga, a todas las drogas. Entró y salió de los hospitales, de los centros de rehabilitación, de congregaciones religiosas y hasta de la cárcel. Sus padres hicieron todos los esfuerzos posibles para ayudarlo, pero fue imposible. Su papá, el doctor Mario Ernesto Lacayo Flores, fue un excelente médico pediatra, muy querido por sus hijos y sus pacientes. Falleció a los 74 años el 2 de septiembre de 2019.
Los tres hermanos emigraron hace varios años y tras la muerte de su papá, le rogaron a su madre que se fuera a vivir con alguno de ellos. Pero Magda dijo que no podía abandonar a su hijo Alejandro, que ella se quedaría a cuidarlo. Hace cuatro años, en 2020, en otro arrebato de drogadicto le dio una paliza a su madre que la mandó al hospital. Alejandro cayó preso, pero su mamá no quiso presentar cargos. Tampoco después de eso Magda quiso irse. Amor de madre hasta su último suspiro, que se lo arrebató precisamente el hijo a quien ella tanto quería y que cuidaba con tanto esmero. Que en paz descanse Magda de Los Ángeles Noguera Vega.
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