La historia de Caín y Abel del Antiguo testamento se repite a menudo en la actualidad; por tierras las personas olvidan que son familia y se matan entre sí, en este caso, un sujeto guatemalteco arrastraba el cuerpo de su propio hermano como un costal de basura en medio del bosque y se preparaba para excavar un agujero y desaparecer el cuerpo, pero fue sorprendido por la Policía.
Esta vez el crimen se registró en Zacapa en Guatemala y fue descubierto gracias a un patrullaje de la Policía Nacional Civil (PNC).
El asesino fue sorprendido cuando los policías realizaban un recorrido sobre la ruta al Atlántico aldea Manzanotal, Gualán, Zacapa.
Los agentes observaron a dos personas entre los matorrales, por lo que uno de los agentes desciende a ver si necesitaban auxilio, en ese momento uno de los hombres sale corriendo y el agente se percata que la otra persona carece de signos vitales.
Junto al cadáver, los policías localizan una escopeta hechiza e inicia persecución que finaliza con la captura de Juan José Esteban Suchite, de 24 años.
De acuerdo con la investigación, el motivo del crimen se originó por la pelea de unos terrenos.
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