Luego de conocerse la renuncia forzada del presidente de Bolivia, Evo Morales, y el vicepresidente, Álvaro García Linera, luego que el jefe del Ejército, Williams Kaliman, pidiera horas antes su dimisión. Los líderes de Latinoamérica, han reaccionado y condenado lo que han llamado un golpe de estado en el país sudamericano.